Flandria volvió a perder y empieza a perder terreno, aunque haya empezado el torneo hace poco, la cosecha de puntos en magra, el potencial que tiene es interesante pero solo lo pudo plasmar en los dos primeros partidos. 

En la calurosa tarde de Berisso la diferencia significativa estuvo en dos cuestiones: la efectividad de Villa San Carlos que cuando tuvo sus oportunidades las capitalizó y la otra fue la tarde de cada arquero. 

Flandria atacó mucho, puso en evidencia algunas fisuras en la última línea de San Carlos pero agrandó su figura el arquero Akimenko, que con atajadas providenciales frente a Palacio en dos oportunidades, Bustamante, Mariatti y Juncos, sostuvo la victoria para el Villero.

Mientras que por el lado de Flandria, el arquero Figueroa no tuvo buenas respuestas en las dos pelotas paradas que tuvo el local: en el primer gol, quedó a mitad de camino en el cabezazo de Lloyay y en el segundo, luego de un tiro libre de Lugones, dejó un rebote al medio para que Samaniego empuje sin oposición. 

Con cambios muy ofensivos desde el comienzo del complemento, el equipo Canario pudo conseguir el descuento con un cabezazo certero de Palacio, tuvo tiempo para ir una y otra vez sobre el local que se quedó con uno menos por la expulsión de Acosta, pero no hubo caso, el arquero Akimenko tuvo una tarde inolvidable para dejar los 3 puntos en Berisso.

Flandria deberá reaccionar rápidamente para recuperarse de dos derrotas consecutivas y no lamentar los puntos que se van perdiendo en el camino y lo hagan alejarse de los puestos de protagonismo.